La reconocida marca de motocicletas KTM anunció oficialmente su quiebra tras no poder hacer frente a una deuda millonaria que arrastraba desde hace meses. Esta decisión pone en riesgo inmediato a más de 500 empleados, con posibilidades de que el impacto se extienda a cerca de 3,000 trabajadores en toda su cadena productiva.
La compañía, que alguna vez lideró el mercado de motocicletas deportivas y de aventura, enfrentó dificultades financieras que se agravaron por la disminución en las ventas y el aumento de los costos de producción. Aunque se espera una reestructuración para intentar salvar algunos aspectos de la empresa, el futuro de KTM luce incierto.
Este golpe afecta no solo a sus empleados, sino también a la industria automotriz en general, que podría enfrentar una cadena de impactos económicos. Los aficionados a las motocicletas también han expresado su tristeza ante la posible desaparición de una marca icónica en el mundo del motociclismo.