+La botarga de Olmecas de Tabasco descendió sobre el diamante del estadio de Macuspana, municipio natal del presidente, Andrés Manuel López Obrador, club del que es fan
+La llamada Cuarta Transformación, a través de las autoridades locales, salió al rescate del equipo de pelota, con una fuerte inversión
+Noticia que salta a las páginas y espacios informativos de la prensa nacional, cuando hay prioridades más urgentes
+Y se hace viral en redes sociales
Ciudad de México, 12 de agosto (BALÓN CUADRADO).- Pochichoco, mascota del equipo de beisbol, Olmecas de Tabasco, causó furor este jueves cuando descendió de un helicóptero de la Secretaría de Marina al estadio de Macuspana, municipio natal del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. Club, por cierto, del que es fan. Noticia que causó polémica, entre otras cosas, porque hay prioridades urgentes, como el combate a la delincuencia organizada.
Olmecas de Tabasco es administrado por el gobierno de la entidad. En 2018, AMLO pidió que no se vendiera a la iniciativa privada y rescató el proyecto. Según el diario español El País, este deporte es un “capricho” del mandatario. Incluso, el mandatario se ha ufanado de haber sido prospecto de Ligas Mayores.
En sus redes sociales, la novena tabasqueña compartió el video de la llegada de la botarga que bajó a una ceremonia del lanzamiento de la primera pelota para los juegos en el estadio Ángel Toledo Meza.
El encargado de hacer el primer disparo fue el exbeisbolista “Chilo” Ruiz. Y es “Pochi”, como le dicen de cariño a la tortuga que anima los juegos del equipo estatal, quien hace entrega de la pelota para comenzar con la temporada.
La mascota no hizo una aparición cualquiera. Llegó al estadio transportado en un helicóptero de la Secretaría de Marina. No solo eso: “Pochi” también es escoltado por dos miembros –mujeres– de ese cuerpo armado de México. La aeronave –modelo Panther– es usada para labores de vigilancia en las costas.
Según versiones de prensa, desde 2018 hay denuncias de que huachicoleros operan en el Golfo de México y saquean Pemex con ayuda de empleados.
En el evento del llamado Rey de los Deportes, otros elementos de la Marina desplegaron una bandera de México en el campo de beisbol.
El gobierno de López Obrador ha invertido millones de pesos en renovar estadios de equipos de la Liga Mexicana de Beisbol como el de los Olmecas de Tabasco y el programa Probeis, que se transformó al Bachillerato Tecnológico de Educación y Promoción Deportiva.
El presidente, aficionado del al juego de pelota, también ha brindado recursos para la construcción del nuevo estadio en Tepic, Nayarit.
“A través del Instituto Nayarita de Cultura Física y Deporte (INCUFID), estamos mejorando el Deportivo Santa Teresita, y rehabilitaremos el Polideportivo rescatado para convertirlo en el más moderno de México”, anunció Miguel Ángel Navarro Quintero, gobernador del estado.
Marina se justifica
Tras la polémica, la Marina informó que este tipo de préstamos es muy usual en eventos deportivos y académicos como graduaciones o la Fórmula 1 en la CDMX.
“El fin de estas participaciones es el de acercar a la Marina con la sociedad de los diferentes lugares donde se desarrollan este tipo de eventos y exaltar los valores patrios”, explicó la dependencia al portal Animal Político.
La dependencia informó que en el evento también se contó con una escolta, banda de guerra, banda de música, así como personal naval.
El rescate
Olmecas de Tabasco es administrado por el gobierno de la entidad a través Olmecas y Espectáculos Deportivos de Tabasco, sin embargo, en los últimos años, pese a las fuertes cantidades de dinero inyectadas, los resultados no han sido óptimos.
Debido a la mala racha, el gobierno de Tabasco buscaba vender a la iniciativa privada el equipo, sin embargo, en septiembre de 2018, cuando López Obrador quedó como presidente electo, pidió a Adán Augusto López, entonces gobernador de la entidad –actual secretario de Gobernación– que no vendiera al equipo.
La sugerencia se tradujo en un aumento al presupuesto.
De acuerdo con una investigación de Emeequis, el subsidio al equipo creció 115%. Una cantidad estratosférica para un equipo cuyo último campeonato fue en 1993.
(Con información de los portales Latinus y Animal Político)