Ciudad de México, 10 de diciembre (BALÓN CUADRADOAgencias).- Ya apodan ‘matagigantes’ al equipo africano.
El capitán de Portugal, de hinojos –todopoderoso dios vencido del balón–, no ha podido contener el mar de llanto que intenta atenuar con las manos en el rostro. Y se ha retirado, con paso cansino, entre lágrimas al vestuario una vez que el árbitro ha pitado la muerte del partido. Algunos jugadores rivales le dan ánimo. Responde con una amarga mueca que cuelga, cansada, de sus labios.
Todo apunta a que, con 37 años a sus espaldas, esta haya sido la última vez que veamos a Ronaldo en un Mundial.
Aclamada por la multitud musulmana que llena los estadios de Doha y exaltada por su victoria ante España – empate con Croacia, ganar a Bélgica, a Canadá–, la selección de Marruecos rompió la barrera que separaba a los equipos de África de las semifinales de la Copa del Mundo.
Lo hizo ante Portugal, que contaba con una de las plantillas más poderosas del torneo pero que vivió desgarrada por la decadencia arrebatadora de Cristiano.
El goleador ingresó en el minuto 50 a tiempo de acelerar el hundimiento de su equipo, aturdido por el 1-0 de En Nesyri al filo del descanso, 42’, y acosado por un rival que primero se hizo fuerte en su área y después se fue soltando con el balón en los pies, de la mano de Amrabat, Hakimi, Amallah, Boufal, Ziyech y Ounahi, cada vez más atrevidos y desmelenados para romper la presión.
Así, Marruecos hizo historia al meterse en las semifinales del Mundial, convirtiéndose en el primer equipo africano en llegar a semifinales de esta competición, tras imponerse 1-0 al Portugal de Cristiano Ronaldo, este sábado en Doha.
El conjunto entrenador por Walid Regragui, verdugo de España en los penales en los octavos de final del torneo, sigue su espectacular camino en Qatar y se enfrentará por una plaza en la final al vencedor del duelo entre Francia e Inglaterra de este sábado.
Marruecos, que acabó con diez por la expulsión de Walid Cheddira (90+3), volvió a hacer valer su fortaleza defensiva y sus rápidos contraataques, ante una selección portuguesa, en la que Cristiano Ronaldo volvió a ver el inicio del encuentro desde el banquillo.
Avisó primero Joao Félix con un remate de cabeza en plancha tras un saque de falta que obligó a estirarse el arquero Yassine Bounou ‘Bono’ (5).
El delantero luso volvería a dar un susto a la numerosa hinchada marroquí con un disparo desde la frontal desviado por un defensa por encima del larguero (30).
Aparece En-Nesyri Portugal, como ya hiciera España, se hizo el amo del balón y el juego frente a una selección marroquí, a gusto sin el esférico y bien replegada atrás, esperando hacer daño con rápidas salidas.
En uno de estos contraataques, Selim Amallah recibió en el corazón del área, pero su remate se fue alto (34).
El último cuarto de hora de la primera parte fueron los mejores minutos de los ‘Leones del Atlas’, que pudieron adelantarse con otro disparo de Sofiane Boufal detenido por Diogo Costa (35).
Cerca del descanso, una nueva llegada por la izquierda acabó con un centro al área donde se elevó En-Nesyri ante la mala salida de Diogo Costa para cabecear al fondo de las mallas lusas (42) para deleite de los aficionados marroquíes.
Por delante en el marcador, Marruecos puso aún más el cerrojo frente a un Portugal, que tras la pausa se lanzó con todo hacia el arco contrario, encerrando a los norteafricanos en su campo.
El seleccionador luso Fernando Santos dio entrada a Cristiano Ronaldo por Ruben Neves y a Joao Cancelo por Raphael Guerreiro (51) para dar más mordiente a su ataque.
Cristiano Ronaldo, de paso, sumó un nuevo récord en su carrera al jugar su partido 196 con el escudo de Portugal e igualar el récord mundial de partidos internacionales de selecciones que detentaba el kuwaití Bader al-Mutawa.
El segundo tiempo fue un asedio continuo de Portugal al área contraria donde Marruecos achicaba balones, tras perder por lesión a su capitán Romain Saiss (57), uno de sus principales baluartes defensivos.
El joven delantero luso Gonçalo Ramos, el héroe de la victoria sobre Suiza en octavos, tuvo el empate en un remate de cabeza que se fue fuera por poco (58).
Portugal llegaba por las bandas para meter balones al área, donde se plantó Cristiano Ronaldo en medio de una maraña de jugadores en busca del balón para hacer el empate.
El astro luso fabricó una gran ocasión al dejar un balón en el pico del área para Joao Félix cuyo disparo se encontró con la buena respuesta de Bono (82), que volvió a erigirse en sostén de su equipo en varios momentos.
El portero marroquí volvería a aparecer para detener un disparo raso de Cristiano Ronaldo (90) en lo que fue la última ocasión clara para revertir el resultado.
En los últimos minutos de descuento, Marruecos se quedó con diez por la salida de Cheddira por doble amonestación (90+3), pero lograría aguantar hasta completar la gesta y seguir su camino de matagigantes en Qatar.
(Con información del diario El País)
