La presidenta Claudia Sheinbaum ha anunciado oficialmente la eliminación del examen COMIPEMS, una medida que busca revolucionar el acceso a la educación media superior en México. Según Sheinbaum, esta decisión responde a la necesidad de acabar con la presión y competencia que el examen generaba entre los estudiantes de secundaria, quienes debían enfrentar un proceso selectivo que dejaba fuera a miles de jóvenes cada año.
La eliminación del COMIPEMS no significa que los estudiantes perderán calidad educativa, según la presidenta. En su lugar, el gobierno implementará un nuevo modelo de asignación automática basado en el promedio de secundaria, garantizando que todos los alumnos tengan un lugar en las preparatorias públicas del país. Esta medida forma parte de un plan más amplio para fortalecer la infraestructura educativa y mejorar la calidad de la enseñanza en las escuelas públicas.
La decisión ha generado opiniones divididas. Mientras algunos sectores aplauden la medida como un paso hacia una mayor equidad, otros han expresado preocupaciones sobre la capacidad del sistema educativo para absorber a tantos estudiantes sin un proceso de selección previo. Sin embargo, Sheinbaum ha asegurado que se realizarán las inversiones necesarias para mejorar las instalaciones y contratar más personal docente.
El cambio, que entrará en vigor en el próximo ciclo escolar, marcará un antes y un después en el acceso a la educación media superior en México. «Todos los jóvenes tienen derecho a estudiar, sin barreras que limiten su futuro», afirmó la presidenta en su anuncio oficial.