El fenómeno climático de La Niña se intensifica y se espera que traiga consigo un invierno particularmente frío y atípico en México. De acuerdo con los especialistas, este evento natural afecta la circulación atmosférica, provocando un descenso significativo de las temperaturas en diversas regiones del país, especialmente en el norte y centro.
La Niña, caracterizada por el enfriamiento de las aguas del Pacífico ecuatorial, no solo traerá bajas temperaturas, sino también un aumento en las heladas y nevadas en zonas que usualmente no experimentan estos fenómenos. Este año, los meteorólogos advierten que las condiciones podrían ser más severas de lo habitual, con episodios de frío extremo incluso en áreas costeras.
Además, las autoridades han hecho un llamado a la población para prepararse ante este panorama, manteniéndose al tanto de los pronósticos y tomando precauciones, como el resguardo de personas vulnerables y el cuidado de animales y cultivos. Este invierno promete ser uno de los más duros de los últimos años, y la clave estará en la prevención.