Por Dana Rodríguez
Ciudad de México, 4 de octubre de 2025 – La conmemoración del 2 de octubre en la Ciudad de México, una fecha simbólica para la memoria histórica nacional, se vio empañada por enfrentamientos entre grupos anarquistas y elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana. En ese contexto, el diputado de Morena, Juan Rubio Gualito, emitió una condena pública a los actos violentos y alerta sobre los riesgos que dichos incidentes implican para las manifestaciones pacíficas.
“Condenable, una de las manifestaciones más violentas, creo que hay un exceso… esto ya no tiene que ver con la libre manifestación de las ideas, ya es una cuestión de vandalizar”, sostuvo Rubio Gualito. A su juicio, cuando se recurre a la agresión y al daño deliberado, la causa social queda opacada por los métodos empleados.
El legislador instó a reforzar la coordinación entre autoridades federales, locales y capitalinas para anticipar la infiltración de grupos violentos en protestas, y para fortalecer los protocolos de actuación policial con enfoque de derechos humanos.
De acuerdo con informes oficiales, en el curso de la marcha hubo 11 policías hospitalizados, derivados de golpes, contusiones y quemaduras, atendidos por el Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM). Testigos y reportes periodísticos señalaron que en distintos tramos del recorrido se lanzaron objetos, se realizaron pintas y hubo confrontaciones con agentes de seguridad, en puntos como Eje Central, Tacuba y calles del Centro Histórico.
Rubio Gualito advirtió que sin una estrategia de control y prevención eficiente, las manifestaciones históricas podrían perder legitimidad pública si son asociadas con vandalismo o desorden, en detrimento del derecho ciudadano a expresar sus ideas.