Dana Rodríguez
CDMX, 31 julio 2025 — La salud mental de niños y adolescentes está en riesgo, y el Congreso de la Ciudad de México ha decidido intervenir. Con base en preocupantes hallazgos sobre los efectos del uso desmedido de celulares en menores, se plantea una regulación estricta para limitar su presencia en las aulas de educación básica.
El diputado Ernesto Villarreal, del Partido del Trabajo, encabeza esta iniciativa. Según expuso, el uso continuo de celulares genera distracción, reduce el rendimiento escolar y fomenta el aislamiento social. Pero lo más alarmante, señaló, es el vínculo entre el uso intensivo de redes sociales y un aumento en los problemas de autoestima, adicción digital, insomnio y pensamientos suicidas en adolescentes.
El problema no es exclusivo de México. Países como Francia y Finlandia ya han implementado medidas restrictivas. En nuestro contexto, sin embargo, el uso de dispositivos móviles también es una respuesta a la desigualdad: para muchos estudiantes, el celular es la única vía de acceso a internet y plataformas educativas.
Ante esto, expertos en salud mental y pedagogía urgen a que la regulación vaya acompañada de estrategias educativas, campañas de concientización y acceso equitativo a tecnología segura. El peligro no está solo en el aparato, sino en la falta de formación crítica sobre su uso.